Empecemos por mencionar tres fases clave de cualquier proyecto:
¿Por qué es beneficiosa esta división?
Nos ayuda a definir unos objetivos y llevarlos a cabo de la manera más satisfactoria para la empresa. Es decir, durante la planificación nos marcamos las metas que deseamos alcanzar y el tiempo y herramientas que utilizaremos para llevarlo a cabo.
Durante el desarrollo veremos que se puede realizar de manera transversal y paralela a otras fases o, por el contrario, deberemos esperar a que una fase finalice antes de comenzar la siguiente.
Por último, en la evaluación conseguimos el análisis de todas las acciones y medios empleados y su efectividad, de manera que estamos a tiempo de incluir variaciones o seguir con el plan original según nos resulte conveniente.
ICSA podemos ayudarte a emprender nuevos proyectos profesionales y acompañarte durante su desarrollo a lo largo del proceso.
Conoce algunos casos de éxito en los siguientes enlaces: